El negacionismo cotidiano será factor de riesgo en las próximas semanas
El relajamiento de las medidas de prevención pueden reforzar una suerte de "negacionismo cotidiano", respecto del riesgo de la pandemia y estimular conductas que en estas condiciones implican grandes riesgos personales y sociales.

Las medidas de relajamiento y progresiva apertura a estados de normalidad, coinciden con mecanismos psíquicos defensivos propios a situaciones disruptivas, como las que estamos viviendo actualmente. La renuencia a aceptar datos duros de la realidad y sus implicancias, sobretodo si estos son dolorosos, pueden activar en algunOS, respuestas ambivalentes, donde por una parte reconocemos la existencia de esta percepción, y por otra, actuamos como si no estas no fueran reales.
De esta manera tratamos de evitar y lidiar con la angustia que nos provocaría su reconocimiento y sus consecuencias. Generalmente este negacionismo cotidiano suele expresarse en el lenguaje bajo la fórmula privilegiada del "ya lo sé... pero es que...", que solemos escuchar por ejemplo, en aquellos que son sorprendidos evitando mínimas medidas preventivas.
Detrás de mucha publicidad con ambientes festivos, se transmiten estos mensajes que solo tratan de estimular el consumo. No hay que olvidar que en general, la infelicidad también funciona como un estimulante del consumo: comprar puede ser una forma de suspensión de la angustia.
Por ello, el rol de las autoridades, del cual no estarían exentas de esta posibilidad y los medios de comunicación, resultan claves. En primer lugar, generando condiciones reales para que las personas no terminen temiendo más a las condiciones de vulnerabilidad y precariedad social, que al propio virus. Pero también para afinar los mensajes, y prevalezcan las conductas necesarias para este tiempo.
Finalmente surgen una serie de recomendaciones que estimulen condiciones de responsabilidad personal y social:
Evitar los eufemismos ante la situación que estamos viviendo. En sentido hablar de rebrote no resulta pertinente, ya que transmite el mensaje de que el covid19 ha sido controlado y la expectativa es respecto de un posible resurgimiento, como si este hubiera sido controlado previa y momentáneamente
Restablecer al menos durante Septiembre, las comunicaciones oficiales diarias en cadena nacional sobre evolución del covid19 en nuestro país. Esto puede contribuir a recordar, en este complejo mes, la agenda sanitaria oficial y sus medidas de prevención, reponiendo su centralidad en medio de fechas festivas
Entregar un bono monetario diario para que personas contagiadas asintomáticas, concurran a la cuarentena en las residencias sanitarias, lo que sería una importante contribución sanitaria y también a las familias, limitando la interacción social.
Finalmente evitar la confusión y falsas expectativas en la comunicación para que exista concordancia entre el mensaje que se informa y todo lo que se transmite en acciones y palabras. No obstante el mero camino del temor o del miedo sólo puede reforzar las conductas de fuga o huida, por lo que se debe apelar a la responsabilidad, privilegiando el lenguaje que fomente la solidaridad y el autocuidado comunitario, en la medida que crezcan los espacios de libertad, para que estos no sean reversibles sino progresivos
Todo lo anterior está dirigido a evitar que prevalezcan los mecanismos psíquicos mencionados, que favorezca un incremento explosivo del contagio y recrudezcan los padecimientos de toda índole, vividos durante estos meses.